❾stá fresquita, verdad? Ahora túmbate, así. No sonríe como cuando la mirábamos hace dos años. Quieren despedirse, hoy no vienen solo a darte las buenas noches, y la luna no está tan brillante, está triste y apagada. Ya estas, en el lado que siempre te ha gustado dormir, junto a la ventana para poder sentir la brisa del verano. Y cada vez me cuesta menos cogerte, quizá sea porque me he acostumbrado a llevarte de un sitio para otro y no me parece que peses tanto o que de verdad has perdido peso. No sabes cuánto hecho de menos aquellos momentos. Yo me quedaba dormido en tu regazo, como un bebé, por eso me llamabas tú bebé. Cuando empezamos a vivir juntos me decías que me acostaba muy pronto y me obligabas a quedarme contigo en el sofá un poco más. Desde hace dos semanas ni siquiera te quejas de que te coja. Bueno, ya va siendo hora de irse a dormir. ¿Quieres algo? ❾stás bien? No entiendo qué me quieres decir con esos ruidos. Y yo sólo puedo responderles que todo fue muy rápido y que nos dimos cuenta demasiado tarde. Me dicen que eres muy joven, que no debería estar permitido llegar así a los 50. No sé qué significa esa media sonrisa Ojala esto sólo fuera un sueño, una pesadilla o una simple broma tuya pero no puede ser. A veces me parece ver que me miras y me entiendes. ![]() No han parado de llorar en todos estos días desde que me dejaste de hablar. Pero ¿Me ves? ¿Me entiendes? Mírame y hazme un gesto de que me entiendes, de que te llegan mis palabras o de que sabes quién soy. ![]() Pero no hemos tenido hijos a los que poder pedir ayuda y las del gobierno no llegan y si lo hacen son insuficientes. Estabas tan llena de vida y ahora tu cuerpo casi está inerte y tu cerebro seco como una pasa. Sí, tú cuerpo está aquí pero ¿qué ha sido de tus recuerdos? ❽e todo lo que hemos vivido? ¿Qué ha sido de estos 25 años, como pareja? ¿Y de esa voz que me decía que me quería? No espero respuestas, ya hace mucho que no las espero y aunque no lo he comprendido aún, sé que no puedes dármelas. La enfermedad de tus padres, la de los míos, la muerte de tu hermana de cáncer y la desaparición de mi sobrino, del que aún no sabemos nada y hemos estado juntos. Cuando por fin te decidiste me hiciste una de las personas más felices y te prometí que no te dejaría sola. Recuerdo que me pediste tiempo y eso hice, esperarte. En el viaje de fin de carrera, aprovechando que lo habías dejado con mi hermano, te hablé de mis sentimientos. Pasaron los años y acabamos graduándonos juntos. Se metió en medio de la conversación, que nunca recordaré de qué iba y dos meses después estabais saliendo. Era mi hermano, que había acabo sus clases. De repente sentí un fuerte golpe en la nuca. "¿tienes algo que hacer?"- tu voz me pareció angelical y era lo único que podía oír a pesar del bullicio que había en aquel pasillo.Īcabamos tomando unas cervezas en la cafetería y mientras yo me quedaba embobado e intentaba despertarme veía cómo ordenabas tus apuntes y los míos. Tras agacharnos y levantarnos pude ver mejor tus ojos verdes. Ese ombligo con el que tantas veces después me has dejado juguetear. ![]() Unos pantalones cortos dejaban ver la belleza de tus piernas y la camiseta era tan corta que podía verse tu ombligo. Llevabas esa preciosa melena morena suelta e ibas con una carpeta llena de apuntes. Te miro y recuerdo aquel día que te vi por vez primera bajando las escaleras de la facultad. Me gustaría que volvieras y que todo fuera como antes pero he acabado comprendiendo que no es posible. ❽ónde has ido? ❽ónde he ido yo? ❽ónde estamos? Nada de esto tiene sentido. ![]() ¿Por qué no dejas de mirar la televisión y me miras a mí? No entiendo nada. Pero no me quieres escuchar y yo ya no sé cómo solucionarlo.
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